En AMAyores disponemos del servicio de asesoría laboral del hogar para aquellas familias que están buscando mejorar las condiciones laborales de su personal doméstico o cuidadores de sus padres.
Nosotros nos encargamos de:
¿Sabías que puedes recibir una sanción de hasta 100.000€ por tener a una cuidadora sin contrato?
Contratar legalmente a un empleado de hogar para el cuidado de ancianos ofrece varias ventajas tanto para el empleador como para el empleado, además de cumplir con las normativas legales laborales. A continuación, detallo las principales ventajas:
Cumplimiento de la normativa laboral: Contratar legalmente asegura que ambas partes (empleador y empleado) están cubiertas por la legislación laboral
Prevenir problemas legales: Contratar de manera legal evita conflictos legales y posibles sanciones por no cumplir con las normativas laborales vigentes.
Seguridad Social: Al registrar al empleado en la Seguridad Social, el trabajador tiene acceso a atención médica, pensiones, desempleo y otras prestaciones sociales, lo cual también puede incluir ayudas en caso de accidentes o enfermedades laborales.
Accidentes laborales: Si el empleado sufre un accidente en el trabajo, tendrá cobertura para recibir atención médica y, si es necesario, compensación económica por incapacidad temporal o permanente.
Vacaciones y días libres: El empleado tiene derecho a vacaciones, festivos y días libres, lo cual garantiza su bienestar y motivación. Esto también puede contribuir a una relación laboral más positiva.
Salario justo: Al establecer un contrato legal, se garantiza que el empleado reciba un salario conforme a la ley, evitando posibles abusos .
Relación laboral transparente: El empleo legalmente registrado establece una relación clara y formal, lo cual puede generar más confianza entre las dos partes. Esto puede resultar en una mayor estabilidad en el servicio de cuidado para el anciano, ya que ambas partes conocen sus derechos y obligaciones.
Mayor motivación y compromiso: Un empleado que sabe que está contratado de forma legal y que tiene derechos laborales, estará más motivado a realizar un buen trabajo, lo que beneficia tanto a la persona que necesita cuidados como a los familiares que contratan el servicio.
Posibilidad de formación: El empleado de Hogar puede acceder a programas de formación o cursos para trabajadores del hogar que están registrados, lo que puede ser útil para mejorar las habilidades del empleado en el cuidado de ancianos.
Mejor calidad de cuidado: Al ofrecer condiciones laborales adecuadas y un salario justo, es más probable que se obtengan empleados cualificados y comprometidos, lo que se traduce en un mejor cuidado para la persona anciana.
Contratar legalmente a un empleado de hogar, los familiares del anciano tienen la tranquilidad de que el trabajador tiene derechos y responsabilidades claras, y que están cumpliendo con la ley.
Personalización del cuidado: El contrato permite ajustar las tareas y responsabilidades de forma más detallada, ya que se establecen de manera clara las condiciones bajo las cuales se brindará el cuidado, ajustándose a las necesidades del anciano.
Aunque contratar legalmente a un empleado de hogar puede implicar una inversión mayor en términos de salario, impuestos y cotizaciones, las ventajas que ofrece en términos de seguridad, estabilidad, protección legal y bienestar para ambas partes son significativas. Esto no solo mejora la calidad del cuidado recibido por el anciano, sino que también contribuye a una relación laboral más profesional, respetuosa y satisfactoria .Un marco legal adecuado que respalde al empleado de hogar, al margen de las consecuencias económicas de no hacerlo, supone un mayor compromiso en el cuidado del anciano
La "nómina de empleado de hogar" se refiere al documento que certifica el pago de los salarios y las condiciones laborales de los empleados que trabajan en el hogar. Es obligatorio hacer nómina a una empleada de hogar. Esta nómina debe cumplir con ciertos requisitos legales y reflejar el salario acordado, las horas trabajadas, las deducciones fiscales, y las contribuciones a la seguridad social, entre otros.
El documento debe incluir lo siguiente:
Datos del empleador y del empleado: Nombre completo, NIF (Número de Identificación Fiscal), dirección y otros datos de contacto.
Fecha de emisión: Debe incluir la fecha de pago o el período de tiempo que cubre el salario.
Detalles del salario: Salario bruto (antes de impuestos), conceptos adicionales (horas extras, bonificaciones, etc.), y el salario neto (después de deducciones).
Deducciones: Contribuciones a la Seguridad Social, u otras deducciones aplicables.
Número de horas trabajadas: Esto puede ser importante para aquellos empleados a tiempo parcial.
Firmas.
En España, el régimen jurídico del empleo de hogar ha sido regulado por el Real Decreto 1620/2011 y otras normativas, que exigen que los empleados de hogar estén dados de alta en la Seguridad Social y que se les otorguen los mismos derechos laborales básicos que a otros trabajadores, como el salario mínimo, la jornada laboral, las vacaciones, etc.
En AMAYORES nos ocupamos de hacer las nóminas por ti.
Dar de baja a un empleado de hogar en España implica seguir un procedimiento formal para cumplir con la normativa laboral y evitar problemas legales. Aconsejamos contactar con expertos para hacerlo la mejor manera posible. En AMAYORES realizamos la gestión. A continuación, explico los pasos generales que debes seguir para dar de baja a un empleado de hogar:
1. Comunicación de la baja al empleado
Es importante comunicar la decisión de manera clara y con la antelación suficiente, ya sea por acuerdo mutuo o por necesidad de finalizar la relación laboral. La normativa establece un plazo de preaviso obligatorio en el caso de los empleados de hogar, dependiendo de la duración del contrato.
2. Notificar la baja en la Seguridad Social
La baja del empleado debe notificarse a la Seguridad Social, para que se de de baja del régimen especial de empleados de hogar .Este paso es obligatorio.
3. Finalización del contrato y finiquito
Una vez que se ha dado de baja al trabajador en la Seguridad Social, es necesario formalizar la terminación del contrato laboral. Para ello, deberás elaborar un finiquito, que es un documento que resume los pagos que el empleado tiene pendientes, como:
Salarios no abonados.
Vacaciones no disfrutadas (proporcionales).
Otras cantidades pendientes, si las hubiera.
Indemnizaciones, si procede.
El finiquito debe ser firmado por ambas partes (empleador y empleado).
4. Entrega d edocumentos
Además del finiquito, se deben entregar otros documentos al trabajador:
Carta de cese.
Certificado de empresa: Para que el trabajador pueda solicitar el desempleo si lo considera necesario .
Última nómina: El recibo correspondiente al mes en el que se termina la relación laboral.
5. Comprobación de cotización
Después de dar de baja al trabajador, puedes verificar que efectivamente la baja se haya realizado correctamente, revisando la cotización en la Seguridad Social. Esto puedes hacerlo a través de la Sede Electrónica de la Seguridad Social.
Si sigues estos pasos, podrás dar de baja correctamente a un empleado de hogar, cumpliendo con las normativas vigentes en España.
Tener a una empleada del hogar sin contrato puede acarrear una serie de consecuencias tanto para el empleador como para la trabajadora, pero principalmente perjudica a las personas dependientes que acaban siendo atendidos por personas sin formación ni vocación para cuidar a los demás. A continuación detallo algunos de los riesgos y problemas más importantes:
1. Sanciones legales para el empleador
Multas y sanciones administrativas: La legislación laboral establece que los empleados del hogar deben tener un contrato de trabajo , lo que incluye el alta en la Seguridad Social. Si no se realiza este procedimiento, el empleador podría enfrentarse a sanciones económicas, que varían dependiendo de la gravedad de la infracción y la legislación local.
Recargos por cotizaciones no pagadas: Si no se ha dado de alta a la empleada en la Seguridad Social, el empleador podría ser obligado a pagar los recargos correspondientes por las cotizaciones no realizadas, además de los pagos retroactivos de las mismas.
2. Derechos laborales de la empleada sin garantía legal:
Falta de prestaciones: Sin contrato, la trabajadora no tiene acceso a una serie de prestaciones sociales como la pensión de jubilación, prestaciones por desempleo o baja por enfermedad, ya que no se cotiza adecuadamente a la Seguridad Social.
Ausencia de cobertura en caso de accidente laboral: En caso de que la empleada sufra un accidente laboral (por ejemplo, durante las tareas del hogar), no podrá beneficiarse de la cobertura de accidente de trabajo, ya que no está registrada como trabajadora.
Derechos de descanso, vacaciones y permisos: La trabajadora no tiene derecho formal a vacaciones pagadas, descansos semanales ni permisos por enfermedad o maternidad si no está formalmente contratada.
Desprotección frente a despidos: En ausencia de contrato, la empleada no tiene una relación laboral regulada, lo que dificulta la protección frente a despidos arbitrarios o no justificados.
3. Con la reforma laboral, aquellas personas que tengan cuidadores sin contrato, pasarán automáticamente a tener un contrato indefinido de jornada completa con el cuidador/a.
4.Incertidumbre jurídica para ambas partes:
Disputas sobre condiciones laborales: Al no haber un acuerdo formal, pueden surgir disputas sobre el salario, la jornada laboral o las tareas a realizar. Si no se tiene un contrato, es más difícil demostrar los acuerdos previos entre las partes.
Falta de pruebas en caso de conflictos: Si la trabajadora o el empleador desean reclamar derechos o resolver un desacuerdo (por ejemplo, sobre el salario no pagado o la indemnización por despido), no contar con un contrato formal puede hacer que la resolución del conflicto sea más compleja, ya que no existen pruebas claras de las condiciones acordadas.
4. Consecuencias para la economía nacional:
Economía sumergida: La contratación de empleados del hogar sin contrato contribuye a la economía sumergida, lo que implica que el Estado deja de recibir ingresos por impuestos y cotizaciones sociales, lo cual afecta la financiación de servicios públicos y prestaciones sociales.
En resumen, no tener un contrato para una empleada del hogar implica riesgos legales, económicos y sociales para ambas partes, además de la desprotección de la trabajadora frente a situaciones imprevistas. Formalizar la relación laboral no solo es una obligación legal, sino también una medida para garantizar una relación justa y segura para ambos.